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EL TONTOLABA'L ARZOBISPO

EL TONTOLABA'L ARZOBISPO

El primer día de los que he estado en Málaga empezó gracioso: habíamos quedado en que me iba a llamar Noeli Barceló desde Tauste, desde la radio, para hablar del blog del Club de Lectura Ramón J. Sender, que habíamos presentado unos días atrás. Poco antes de la hora convenida, un vecino empezó a darle al guarrito (en Málaga llaman así al taladro). Justo cuando me llamó, me avisó el móvil de que estaba su batería echando las últimas bocanadas, así que busqué dónde enchufarlo, sin desconectarme... cuando lo hube hecho, apareció mi primo Manolo cantando. Además, yo oía mal, pero a Maribel y a Pilar ni las oía, o sea, no sabía lo que decían. Por tanto, me encontraba sin saber si lo que contestara iba a ser algo dicho ya por ellas, me encontraba aturdido, pues. Porque no sabía si repetiría algo y por todos los inconvenientes que se me iban presentando, uno de ellos, y no el mínimo, mi inexperiencia en tal situación radiofónica. En fin, mal que bien, dije casi todo. Sin embargo, creo que no se dijo que pretendemos que ese Club de Lectura sea una ventana al mundo, tanto desde el club, como hacia al club. Con el personal de Tauste podemos vernos con cierta facilidad y, por ende, hablar directamente. Pero queremos cambiar impresiones, oír opiniones, colaborar y “ser colaborados” por cualquiera que entienda lo que en el blog decimos. Y no lo dije cuando pude hacerlo. Lo digo, pues, ahora, porque puedo y porque quiero.

 

            Pero voy a otra cosa, que me enredo.

 

            Vi en el periódico Público una noticia en la que se hablaba de cosas que había dicho el arzobispo de Granada. Todas las muchas sandeces que dijo no las voy a comentar, quien quiera puede leerlas, ya que hago ese enlace. Me quiero ceñir a una cuestión, porque me tiene harto que aún se trate de sorber el cerebro hoy en día de la misma torpe o burda manera que se hacía antes por parte de la jerarquía eclesial.

 

            Se nos ha dicho siempre que lo sexual ha de tener únicamente fines reproductivos. Es decir, la sexualidad humana sólo se basa en la cópula y sólo se ha de copular para tener progenie. Para dar fuerza al asunto, es decir, para argumentar, siempre nos han dicho que, si no pretendemos tener hijos, nos abstengamos de “sexuar”, porque, de hacerlo, seríamos como animales al dejarnos llevar por los instintos (véase la primera de las definiciones de la Real Academia de la Lengua). Creo que se ve en esa definición de modo palmario lo que es instinto, es decir, copular para conservar la especie, no lo contrario. También creo que es palmario, por ende, que nos distinguimos de casi cualquier animal en que podemos relacionarnos sexualmente en cualquier momento y sin motivos generativos, es decir, entre otras cosas, la sana sexualidad sana y bien entendida, no del modo mojigato, tenebroso o sucio que nos quieren dar a entender los próceres de la Iglesia Católica.

 

            Me pregunto yo si no estarán esos señores, vetustos, incultos, manipuladores y torpes en muchos casos, incurriendo en un pecado enorme al mentir, al contradecir de tal manera la propia doctrina que predican, pues creo que contraviene lo que dicen que dictó su Dios porque hacer las cosas como dicen que se haga –sigo refiriéndome al sexo, que a las otras cosas ya se ha referido Wyoming en otro lugar con mucho acierto- va en contra de la naturaleza humana, ¿o para qué nos ha dotado, si no, de un sexo que no se basa en el celo, como en los demás bichos vivientes? ¿para jodernos y aguantarnos cuando tengamos deseos lúbricos, Él, que tan misericordioso y buena gente dicen que es?

 

            Anda, que ya les vale. A ellos y a quienes les crean a pies juntillas. Que no me meto con la espiritualidad de cada cual, que me refiero a los manipuladores “conveníos”. Y en estos casos y tiempos parece que no les interesa hablar de las cosicas del que fuera su jefe de otro tiempo, el papa Borgia (ascendencia borjana, por cierto, tenía el buen señor) que vaya cómo se lo montó en tantas y diversas materias.

 

            ¡Qué tontolaba es el arzobispo de Granada! No sé si es papanatas o se lo hace. Chaquetero o mequetrefe. Cínico o directamente chulo, como ha demostrado en otras ocasiones. Con la Teología de la Liberación, en todo caso, no parece tener nada que ver.

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